El Otro
Tiempo atrás, a partir de una experiencia de carácter introspectivo surgido de la práctica de la meditación Zen, intenté realizar un ensayo fotográfico para representar simbólicamente ese estado de conciencia.
Esta serie está basada en la combinación de imagen y palabra, adoptando por su sencillez y espontaneidad el tipo de poema japonés denominado haiku.
La serie El Otro hace alusión al origen de mi propio proceso creativo y al estado de lucidez que me acompaña desde el inicio hasta la finalización de las obras. Me preguntaba qué hechos condicionaban la ocurrencia de ideas, y qué cosas podrían producir la aparición de la inspiración.
Lo que nació como una búsqueda no intencionada (aunque suene paradójico), se manifestaba fluidamente, sin conflictos ni ansiedades frustrantes.
Entonces, el Otro se expresa libremente.
No es fácil alcanzar esa «atención sostenida», sin preocuparse por la obtención de resultados inmediatos. El Otro tiene sus propios tiempos, y estos no siempre concuerdan con nuestra avidez creadora.
El Otro no es, pues, otra faceta de mi personalidad, ni un producto de mi deseo: es lo que late en cada uno de nosotros y que nuestro ritmo de vida muchas veces logra opacar.
A pesar de todo, el Otro se expresa. Los procesos y materiales fotográficos son algunos de los canales a través de los cuales este «Otro» se vincula con quien lo quiere escuchar.
Pero antes debemos acallar nuestro ruido interior, recuperar el Silencio. Si le permitimos aparecer con más frecuencia, si no lo atemorizamos con nuestra lógica limitante, si le dejamos ganar territorio, puede que algún día el Otro llene el espacio que le corresponde y tome el control de nuestros actos.
Estaremos, lo sé, en buenas manos.
Técnica:
Impresas en papel de Plata sobre gelatina, con entonado posterior.